Las Viñetas, los medios y el debate abierto
Timothy Garton Ash sostiene que muchos analistas han caído en la tentación de considerar que nos encontramos ante un choque crucial entre el Islam y Europa, o el Islam y Occidente. Sin embargo, el autor niega esta visión y afirma que la auténtica línea divisoria es la que separa a moderados y extremistas en ambos lados. Ésta no es una guerra, escribe, sino un debate interno dentro del Islam y dentro de la propia Europa, donde viven ya millones de musulmanes. La pregunta esencial es: ¿cómo lograr el equilibrio entre la libertad de expresión y el mutuo respeto en este mundo interconectado, en el que la comunicación instantánea es, a la vez, una bendición y una maldición? Garton Ash cree que para ayudar a la resolución de este conflicto, lo importante es ofrecer plataformas de discusiones libres y civilizadas para que los musulmanes europeos debatan entre sí.*(1)
El diario danés ha ejercido irresponsablemente un derecho. Como irresponsable fue también la reproducción de las viñetas, por motivos de solidaridad gremial, en algunos diarios europeos -ABC en España, France Soir en Francia como las reprodujeron otros diarios fuera del continente europeo… y la larga lista de los medios que se unieron al lado de Jellands-Posten-. La prensa británica actuó más sabiamente: defendió el derecho del diario danés a publicar las viñetas, pero no secundó una provocación gratuita.
¿Por qué suscitó este asunto de las viñetas danesas tantas reacciones y consecuencias por todas partes del mundo?. No queremos hablar de la furia islámica y las interminables demostraciones que expresaron el descontento y la rabia y, que por desgracia, causaron daños materiales y también daños trágicos (docenas de muertos y centenares de heridos en Pakistán, Libia y Nigeria, durante las protestas populares en varias ciudades del mundo islámico).
En el epicentro de este turbulento “Affaire” ¿cómo reaccionaron y reaccionan los medios de comunicación, cubriendo los episodios de esta nueva crisis y sus consecuencias tras las ‘reacciones globales diversas’?Los medios de comunicación jugaron y todavía juegan un papel importante, dado la influencia poderosa que pueden ejercer sobre la opinión pública de modo positivo o negativo.
No obstante nosotros, partiendo desde nuestra visión abierta y multicultural, hemos venido desde el principio advertiendo, al lado de otras voces, de otros intelectuales, periodistas, pensadores y políticos : “que apaguen la mecha por favor” “los medios de comunicación deben promocionar debate positivo entre musulmanes y europeos”. Todavía seguimos insistiendo y llamando a la moderación, al diálogo intercultural y al entendimiento mutuo (…) de todas maneras, no parece que se pueda llegar a encontrar salidas llamando irracionalmente a la confusión bajo falsas argumentaciones y presiones sobre el ‘otro’ y siempre sobre el otro como único responsable.
Ciertamente por vías de debate y mediante un diálogo constructivo entre todas las partes, se puede - si no solucionar este nuevo episodio de la crisis- por lo menos, se puede llegar a reducir las tensiones de un conflicto de origen cultural o intercultural con antecedentes o sin antecedentes ( anteriormente con la publicación de la novela del escritor musulmán de origen indio,Salman Rushdí). "Los moderados versus los extremistas es el tema central de esta nueva crisis intercultural entre el mundo musulmán y los occidentales". Nosotros pensamos que de este modo, o sea vía ddebate y diálogo, se pueden construir mejores lazos entre millones de musulmanes y no musulmanes en Europa, donde podrían, sin problemas, coexistir diversas culturas y creencias, como ha sido el caso durante largos tiempos de la historia contemporánea europea desde los años 50, tras la época colonialista y el comienzo de las inmigraciones hacia el continente europeo.
¿Cómo pueden los medios animar este diálogo y participar, activamente y positivamente, lejos de todo tipo de conflictos y toda tendencia a politizar las tensiones entre los fundamentalismos que conducen los extremistas de las dos partes?. Repetimos, e insistimos que los medios de tendencias a la moderación, deben promocionar el diálogo entre los intelectuales y los políticos europeos o occidentales de una parte y los musulmanes de otra. Este asunto se desencadenó tras la publicación de algunos dibujos daneses que, sin el ruido mediático no iban a tener todas las consecuencias y reacciones que han tenido, iban a pasar como miles de dibujos o viñetas de humor que se publican en todos los diarios diariamente sin problemas, pero los medios de comunicación, por sus increíbles poderes, incluida la manipulación, han podido transformar la noticia en escándolo y el secándolo en crisis internacional.
Recientemente, la agencia (EFE) nos sorprendió otra vez, con una noticia nueva del 18 de febrero de 2006: (El periódico escocés Harald publicó una entrevista con el dibujante danés Kurt Westergaard de la viñeta más comentada por su extendida divulgación en numerosos medios de comunicación , incluidas las páginas Web de Internet. “El dibujante danés Kurt Westergaard, cuya caricatura del profeta Mahoma con ‘un turbante en forma de bomba’ ha enfurecido al mundo árabe y toda la comunidad internacional musulmana, dice que no se arrepiente.”
“En la entrevista con "The Herald", que se hizo por escrito y a través de un intermediario como medida de precaución debido a las amenazas de muerte que pesan sobre el artista, éste explica que la inspiración para su viñeta fue "el terrorismo, que recibe su munición del Islam". Su dibujo del profeta fue publicado por primera vez el pasado septiembre, junto con los de otros colegas, en el diario danés de centro-derecha "Jyllands-Posten", y desde entonces se ha reproducido en varios medios de comunicación europeos. Westergaard confiesa que no se esperaba esta reacción, aunque, preguntado sobre si se arrepiente de la viñeta o de su publicación, simplemente contesta: "No". Westergaard opina que los artistas deben poder decir "lo que quieran y de la manera que quieran".
(1)* Timothy Garton Ash es director del Centro de Estudios Europeos en el St Antony´s College, Oxford, y es alto miembro de la Universidad de Stanford. A.Axdiri (Tiempos de cambio)
Timothy Garton Ash sostiene que muchos analistas han caído en la tentación de considerar que nos encontramos ante un choque crucial entre el Islam y Europa, o el Islam y Occidente. Sin embargo, el autor niega esta visión y afirma que la auténtica línea divisoria es la que separa a moderados y extremistas en ambos lados. Ésta no es una guerra, escribe, sino un debate interno dentro del Islam y dentro de la propia Europa, donde viven ya millones de musulmanes. La pregunta esencial es: ¿cómo lograr el equilibrio entre la libertad de expresión y el mutuo respeto en este mundo interconectado, en el que la comunicación instantánea es, a la vez, una bendición y una maldición? Garton Ash cree que para ayudar a la resolución de este conflicto, lo importante es ofrecer plataformas de discusiones libres y civilizadas para que los musulmanes europeos debatan entre sí.*(1)
El diario danés ha ejercido irresponsablemente un derecho. Como irresponsable fue también la reproducción de las viñetas, por motivos de solidaridad gremial, en algunos diarios europeos -ABC en España, France Soir en Francia como las reprodujeron otros diarios fuera del continente europeo… y la larga lista de los medios que se unieron al lado de Jellands-Posten-. La prensa británica actuó más sabiamente: defendió el derecho del diario danés a publicar las viñetas, pero no secundó una provocación gratuita.
¿Por qué suscitó este asunto de las viñetas danesas tantas reacciones y consecuencias por todas partes del mundo?. No queremos hablar de la furia islámica y las interminables demostraciones que expresaron el descontento y la rabia y, que por desgracia, causaron daños materiales y también daños trágicos (docenas de muertos y centenares de heridos en Pakistán, Libia y Nigeria, durante las protestas populares en varias ciudades del mundo islámico).
En el epicentro de este turbulento “Affaire” ¿cómo reaccionaron y reaccionan los medios de comunicación, cubriendo los episodios de esta nueva crisis y sus consecuencias tras las ‘reacciones globales diversas’?Los medios de comunicación jugaron y todavía juegan un papel importante, dado la influencia poderosa que pueden ejercer sobre la opinión pública de modo positivo o negativo.
No obstante nosotros, partiendo desde nuestra visión abierta y multicultural, hemos venido desde el principio advertiendo, al lado de otras voces, de otros intelectuales, periodistas, pensadores y políticos : “que apaguen la mecha por favor” “los medios de comunicación deben promocionar debate positivo entre musulmanes y europeos”. Todavía seguimos insistiendo y llamando a la moderación, al diálogo intercultural y al entendimiento mutuo (…) de todas maneras, no parece que se pueda llegar a encontrar salidas llamando irracionalmente a la confusión bajo falsas argumentaciones y presiones sobre el ‘otro’ y siempre sobre el otro como único responsable.
Ciertamente por vías de debate y mediante un diálogo constructivo entre todas las partes, se puede - si no solucionar este nuevo episodio de la crisis- por lo menos, se puede llegar a reducir las tensiones de un conflicto de origen cultural o intercultural con antecedentes o sin antecedentes ( anteriormente con la publicación de la novela del escritor musulmán de origen indio,Salman Rushdí). "Los moderados versus los extremistas es el tema central de esta nueva crisis intercultural entre el mundo musulmán y los occidentales". Nosotros pensamos que de este modo, o sea vía ddebate y diálogo, se pueden construir mejores lazos entre millones de musulmanes y no musulmanes en Europa, donde podrían, sin problemas, coexistir diversas culturas y creencias, como ha sido el caso durante largos tiempos de la historia contemporánea europea desde los años 50, tras la época colonialista y el comienzo de las inmigraciones hacia el continente europeo.
¿Cómo pueden los medios animar este diálogo y participar, activamente y positivamente, lejos de todo tipo de conflictos y toda tendencia a politizar las tensiones entre los fundamentalismos que conducen los extremistas de las dos partes?. Repetimos, e insistimos que los medios de tendencias a la moderación, deben promocionar el diálogo entre los intelectuales y los políticos europeos o occidentales de una parte y los musulmanes de otra. Este asunto se desencadenó tras la publicación de algunos dibujos daneses que, sin el ruido mediático no iban a tener todas las consecuencias y reacciones que han tenido, iban a pasar como miles de dibujos o viñetas de humor que se publican en todos los diarios diariamente sin problemas, pero los medios de comunicación, por sus increíbles poderes, incluida la manipulación, han podido transformar la noticia en escándolo y el secándolo en crisis internacional.
Recientemente, la agencia (EFE) nos sorprendió otra vez, con una noticia nueva del 18 de febrero de 2006: (El periódico escocés Harald publicó una entrevista con el dibujante danés Kurt Westergaard de la viñeta más comentada por su extendida divulgación en numerosos medios de comunicación , incluidas las páginas Web de Internet. “El dibujante danés Kurt Westergaard, cuya caricatura del profeta Mahoma con ‘un turbante en forma de bomba’ ha enfurecido al mundo árabe y toda la comunidad internacional musulmana, dice que no se arrepiente.”
“En la entrevista con "The Herald", que se hizo por escrito y a través de un intermediario como medida de precaución debido a las amenazas de muerte que pesan sobre el artista, éste explica que la inspiración para su viñeta fue "el terrorismo, que recibe su munición del Islam". Su dibujo del profeta fue publicado por primera vez el pasado septiembre, junto con los de otros colegas, en el diario danés de centro-derecha "Jyllands-Posten", y desde entonces se ha reproducido en varios medios de comunicación europeos. Westergaard confiesa que no se esperaba esta reacción, aunque, preguntado sobre si se arrepiente de la viñeta o de su publicación, simplemente contesta: "No". Westergaard opina que los artistas deben poder decir "lo que quieran y de la manera que quieran".
(1)* Timothy Garton Ash es director del Centro de Estudios Europeos en el St Antony´s College, Oxford, y es alto miembro de la Universidad de Stanford. A.Axdiri (Tiempos de cambio)
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