Es el fin de 'Le Journal', ha muerto, ya nunca habrá otra publicación así en Marruecos». Son palabras de Aziz El Yacoubí, redactor del semanario más crítico con el régimen que el jueves pasado cerró sus puertas por "impago de deudas" según el orden judicial. Mientras obviamente hemos de deducir que la realidad es diferente visto las "circunstancias del cierre justificado o no" sobre todo en tiempos de crisis económica que ha golpeado a muchos sectores entre ellos el de los medios de comunicación y prensa.
'Le Journal Hebdomadaire', publicación independiente y pionera en el país, una las voces más críticas con el poder, “que ha cabalgado sin miedo sobre los asuntos marroquíes más espinosos, se ha convertido en la última víctima del cierre de medios de comunicación en el Reino. La justicia en manos del poder lo ha explicado por motivo de «importantes deudas», mientras que en la redacción se habla de presiones políticas.
Un tribunal de Casablanca ordenó el lunes la liquidación de Média Trust, la sociedad que editó la revista hasta 2003, y que tenía deudas con la Seguridad Social y varios bancos de unos 450.000 euros. La edición de la publicación pasó en esa fecha a manos de otra empresa, Trimedia, pero la Justicia no ha hecho diferencia entre las dos.
«Todas las publicaciones tienen este tipo de deudas. Y no sólo en Marruecos. Con la actual crisis, esto es una tendencia mundial», asegura Yacubi, que no obstante apunta a que «habrá que buscar las razones del cierre de 'Le Journal' en otro sitio». A sabiendas era claro que las grandes empresas se alejaban de anunciarse en el semanario muy crítico con el Makhzen, de ahí comenzó el principio del fin: su publicidad reducida a unas escasas páginas y sus deudas multiplicadas exponencialmente.
La revista ya fue prohibida en 2000, y no volvió a editarse hasta que su director, Abubakr Jamaï, se puso en huelga de hambre. Varias multas por publicar artículos críticos con el poder recayeron entonces directamente sobre Jamaï, que en 2006 se vio obligado a dimitir y a abandonar el país para no perjudicar a la cabecera.
En 2009 regresó como editorialista, aunque escribía desde Murcia, donde reside. Sus artículos sobre cómo Rabat ha lidiado con el caso de la activista saharaui Aminatu Haidar no han sentado nada bien en las altas esferas. Con el cierre de 'Le Journal Hebdomadaire', Marruecos se queda sin una de sus voces críticas más importantes.
"Se acabó 'Le journal'" expresa uno de sus redactores, Cristoph Gugen, quien admite que el cierre parece ser definitivo, y que en cualquier caso "esta semana no va a salir el número".
Otro de sus redactores, Aziz Yaakubi, subraya que "la revista tiene deudas, eso no lo puede negar nadie, pero no es la única, la mayor parte de los periódicos marroquíes tienen deudas de ésta clase". Cree que "las razones del cierre hay que buscarlas en otra parte".
Los trabajadores de 'Le journal' se han reunido para tratar el futuro de la publicación. Su cierre ha coincidido con el comienzo del "debate nacional sobre la prensa", cuyo objetivo, es el de "dialogar con los profesionales de este campo cardinal de la vida democrática", según las autoridades que lo anuncian desde hace meses.
Otros motivos del cierre: La osadía de su línea editorial, desafío a los gobernantes, el libro de Ali Amar ( Le gran malentendu) cofundador de Le journal, más la publicación de un interwiu con la mujer saharaui Aminetu Haidar. Más y más razones hay que buscar en otra parte y no en lo aparente que es la aplicación de la justicia.
1 comentario:
No se si LE JOURNAL era tan independiente que lo décia!
Su linea éditorial era claramenta dictada para hacer dano al regimen de Marruecos!
LE JOURNAL no buscaba el bien del pais. Lo que querria es destabilisar las instituciones, quiralas toda forma de credibilidad!
Eso no es periodismo independiente!
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